Laminas y Aceros

Ya ha pasado tiempo desde nuestro blog anterior ¿Qué ha pasado con el cohete de Acero de Elon Musk?, y han sucedido muchas novedades y avances en su proceso constructivo y de pruebas.

Como cualquier tipo de acero, al trabajar con el tipo inoxidable podemos lograr diversos acabados de acuerdo al estilo o vista que queramos dar a nuestra pieza o trabajo total.  Sin embargo, es necesario que antes de tomar la decisión del tipo de acabado a conseguir tengas presente que es necesario regirnos bajo ciertos parámetros para poder lograr un éxito en el trabajo final.

El Hierro y su uso se conoce desde hace miles de años (Aproximadamente 1500 A:C), tenemos en mente el clásico herrero del pueblo quien martilló en mano, golpeaba constantemente el hierro calentado previamente en una hornilla de carbón, para poder dar forma más fácilmente al artículo que deseaba construir, ya sea una espada, pala, herramientas en general; sin saberlo estaba creando el acero que conocemos en la actualidad.

Los aceros para herramientas representan un pequeño, pero importante segmento de la producción total del acero. Estos aceros son hechos y procesados para lograr altos estándares de control y calidad y son utilizados principalmente para herramientas, troqueles y diversos componentes mecánicos que demandan aceros con propiedades especiales. 

En la primera parte se definió el concepto de los tratamientos del acero y de igual manera se abordó el primero de ellos, referente a los tratamientos superficiales. Para esta segunda parte se hablará de los dos tipos de tratamientos restantes: los tratamientos térmicos y los tratamientos termo-químicos.

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Se denominan tratamientos del acero a la serie de técnicas y procedimientos aplicados sobre una pieza de acero en estado sólido, y que tienen como finalidad modificar y mejorar algunas de sus propiedades, tales como la dureza y la resistencia.