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En general, un remache consta de 3 partes:
Cuerpo de remache: tubo redondo, también conocido como vástago o punta, que es la pieza que se inserta entre las piezas que se quiere ensamblar.
Cabeza de remache: Es la parte de mayor diámetro que el resto del cuerpo del remache. Se utiliza para sujetar las piezas a ensamblar.
Eje: La parte central y larga del remache, que es la parte que se une al remache y se retira de la conexión.
Tipos de remaches:
Tornillos estándar:
Los tornillos estándar son elementos de fijación que garantizan una solución fuerte y segura. Se pueden ensamblar varios materiales (aluminio, acero, cobre), lo que proporciona un montaje rápido y económico.
Incrustaciones de flores:
Este remache es ideal para aplicaciones que involucran materiales blandos o de baja presión, como plásticos, fibras y madera. Además, son útiles para realizar conexiones entre materiales duros y materiales blandos. Además, este tipo de remache tiene una cabeza de bloqueo de diámetro extra grande que distribuye la carga y la fuerza de sujeción, reduciendo la posibilidad de sellado y el riesgo de rotura del material. ¡Brillante!
Este tipo de remache se usa en las industrias de automóviles, camiones, construcción y más.
Paraguas remache:
Se adapta a los cambios de grosor al esparcir elementos. Este remache es ideal para aplicaciones de materiales blandos o materiales de baja resistencia.
Además, es fácilmente adaptable a diversas variaciones en el espesor del material. También es muy resistente a la abrasión. ¡Su nombre parece haber sido elegido muy bien!
Fundición de clavos:
Los remaches personalizados se utilizan para un corte seguro. Tiene una estructura escalonada que permite un montaje sencillo, rápido y económico.
Uñas a prueba de agua:
Como su nombre indica, garantiza la resistencia al agua. Las juntas entre los materiales quedan completamente selladas, evitando así la fuga de líquido o vapor.
Fuentes: Como Funciona
Otras links: Láminas y Aceros
