El acero viene en muchas y distintas formas y grosores (al grosor se le conoce como “calibre”). Ten en cuenta que un calibre más pequeño significa un mayor grosor. Con eso en mente, es posible cortar un acero de calibre delgado (por ejemplo, una lámina de metal) utilizando una variedad de herramientas. Por su parte, para cortar un acero más grueso (por ejemplo, tuberías, tubos y placas), probablemente sea necesario utilizar sierras eléctricas y sopletes. También es posible usar sierras y sopletes para cortar acero delgado, pero son herramientas poco prácticas a menos que vayas a cortar una gran cantidad o necesites hacerlo con mucha frecuencia. Para obtener mejores resultados, antes de comenzar a cortar, limpia la superficie de trabajo, realiza las mediciones respectivas y marca las líneas sobre el acero para emplearlas a modo de guías.