Desde su creación, el acero a venido a formar parte importante de la civilización, pues debido a sus propiedades y características ha impulsado el desarrollo de las ciudades llegando a encontrarse prácticamente en todo lo que nos rodea, principalmente en obras civiles, medios de transporte y aparatos que mejoran la calidad de vida de las personas.
En ocasiones estas construcciones llegan a convertirse en un rasgo característico de un lugar y se vuelven parte de su identidad, tal fue el caso de la ciudad de Mérida y sus famosas veletas de acero que adornaban el paisaje de la capital Yucateca a finales del siglo XIX y principios del siglo XX.