En el mercado existen diferentes métodos para cortar productos hechos en acero, entre los más utilizadas podemos encontrar el oxicorte, el corte por plasma e incluso el corte por láser. Sin embargo, todos estos métodos trabajan a muy altas temperaturas, que si bien logran su cometido también terminan por afectar el material mismo.
Para solucionar este inconveniente se puede emplear un método de corte en frío que no sólo suele ser más veloz y preciso, sino que no afecta de ningún modo el material que se corta, nos referimos por supuesto al corte por chorro de agua o WaterJet cutting.