Laminas y Aceros

Como hemos mencionado en otras publicaciones, en la actualidad el acero se ha convertido en un material versátil y estéticamente atractivo, integrándose en espacios interiores y exteriores con elegancia y funcionalidad.

En esta oportunidad queremos hacer referencia al recubrimiento en fachadas de estructuras. El uso de placas o láminas de acero en la arquitectura ha ganado tal popularidad, especialmente en obras de arquitectos como Frank Gehry, Jean Nouvel y Thom Mayne. Esta tendencia no solo aporta un aspecto moderno y distintivo a los edificios, sino que también ofrece durabilidad y versatilidad en el diseño. La combinación de estética y funcionalidad en el uso del metal está transformando el paisaje urbano contemporáneo.

Las fachadas son una elección importante dentro el diseño de una obra;  ya que influye en la estética, la eficiencia energética y la durabilidad del edificio. Es importante considerar no solo el aspecto visual, sino también las propiedades técnicas como la resistencia a la intemperie y el aislamiento térmico. Otro factor de decisión es el presupuesto disponible que jugará un papel clave en la selección del material adecuado, asegurando que se cumplan tanto los requisitos estéticos como funcionales sin exceder los costos.

Las aleaciones mayormente utilizadas para revestir estructuras son:

• Acero inoxidable: Ideal para zonas con alta humedad o exposición al agua, ya que es resistente a la corrosión.
• Acero galvanizado: Recubierto con zinc, es perfecto para exteriores porque previene la oxidación.
• Acero corten: Este acero desarrolla una capa de óxido controlada que lo protege de la corrosión y ofrece una estética rústica y única.
• Paneles compuestos de acero: Combinan acero con otros materiales para mejorar el aislamiento térmico y acústico.

De esta forma podemos concluir que el acero no solo mejora la funcionalidad de un edificio, sino que también realza su diseño y carácter arquitectónico.

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Fuente: Archdaily