Laminas y Aceros

El pueblo de Teabo, Yucatán, México; es una comunidad muy tranquila ya que la gente que habita allí es muy sencilla, amigable, respetuosa. En esa localidad por las noches los fantasmas se manifiestan, ya que recientemente se cuenta que en el centro del pueblo en el lateral izquierdo de iglesia se escuchan llantos y lamentos que salen del terreno.

Se dice que ese espacio en muchos años atrás fue utilizado como "Cementerio" y dejó de serlo, al llegar a una capacidad máxima de restos humanos, con el tiempo ya no se ocupaba, ni visitaba. Mientras tanto se dice que los ruidos escalofriantes que se escuchan en ese espacio, es por las almas de las personas que fueron enterradas ahí y han sido abandonados.

 Así tal como se comentan, estas manifestaciones han sido desde siempre, ya que antiguamente no había corriente eléctrica y en palabras de los habitantes se dice que, en esos tiempos no se podían quedar despiertos, la gente estaba acostumbrada a madrugar, desayunaban entre 5 y 6 de la mañana, almorzaban entre 11 y 12 del día y la cena 5 y 6 de la tarde. 

La gente del pueblo estaban acostumbrados a dormir muy temprano o al menos permanecer en sus casas antes de que oscuridad, ya que se decía que si se quedaba en la calle más tarde, era muy seguro que los espantarán. En las calles de noche se  escuchaban ruidos de cadenas arrantrándose y los que se arriesgaban a verlo decían que era una caja de muerto que iban arrastrando por seres que no se podían ver. 

Se platica que las personas que llegaron a ver esas situaciones corrían el riesgo de perder la vida ya que cargaban aire malo, que sólo se podía eliminar un curandero o brujo.

Esta es una de las muchas leyendas que todavía en nuestra actualidad se siguen comentando de generación en generación.

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Fuente: Elaboración propia