Situado cerca de Lishan en la provincia de Shaanxi, en el centro de China, se encuentra uno de los descubrimientos arqueológicos más impresionantes de los últimos tiempos. El ejército de los guerreros de terracota fue descubierto en el año 1974 por agricultores que estaban cavando un pozo. Sin embargo, años atrás, ya se habían encontrado en esta misma zona algunos restos, pero todo quedaba en unas simples especulaciones.
La historia de los guerreros de terracota se remonta a hace más de 2.200 años. Tras su descubrimiento y posterior estudio se sabe que se comenzó a construir en el 246 A.C y se acabó en el 206 A.C. El objetivo de la construcción de este ejercito era la protección de la tumba del Emperador Qin Shi Huang. En aquellos tiempos era muy común realizar este tipo de mausoleos construidos con la finalidad de brindar protección espiritual a los emperadores una vez pasaran al plano espiritual. Estas construcciones iniciaban poco tiempo después de que se nombrara al emperador. Se dice que probablemente el objetivo del ejército era actuar como figuras guardianas de la tumba o servir a su gobernante en la próxima vida.
Es tan impresionante este descubrimiento por el número de piezas encontradas en tamaño real. Más de 8.000 estatuas de soldados (cada uno con fisionomías diferentes en rostro, cuerpo y manos), una caballería de 150 animales, 130 carros tirados por toros, 520 caballos y hasta 40.000 puntas de flecha junto con docenas de espadas, lanzas, ballestas y otras armas de bronce; además se encontraron también otros tipos de animales y figuras humanas. El mausoleo de Shi Huangdi, que en realidad es un complejo funerario que ocupa la increíble extensión de 35 a 60 kilómetros cuadrados.
El emperador Shi Huangdi fue el rey del estado Qin, que unificó China a partir del 221 a.C. y luego fundó la dinastía Qin. Gobernó como primer emperador de China hasta su muerte en el 210 a.C. Durante su reinado fue considerado un emperador déspota y megalómano. Shi Huangdi tenía la especial obsesión de ser inmortal y encomendó a sus científicos elixires con el fin de lograrlo. Sin embargo, esto nunca se pudo obtener.
Al conocer que de forma natural la inmortalidad no la iba a conseguir, Shi Huangdi decide mandar a construir el mausoleo.
Uno de los datos más interesantes de este descubrimiento arqueológico es que pese a los años de estar enterrados (más de 2,000); todas las piezas se mantenían intactas. Se dice que esto se debe a los materiales utilizados, principalmente al cromo. Otra curiosidad, es que la tumba del emperador jamás será abierta, el túmulo de la tumba tiene forma de pirámide de tres escalones, mide unos 1640 metros de circunferencia, 350 metros a lo largo de cada lado, y se eleva hasta una altura de 60 metros. El conjunto está rodeado por un doble muro. También se dice, que en su interior se encuentran grandes riquezas, pero también trampas mortales para asegurarse que no sean saqueadas sus posesiones y el emperador pueda descansar en paz.
Los Guerreros de Terracota sin duda son de las piezas arqueológicas dignas de visitar y admirar. Declarado por la UNESCO como Patrimonio Cultural de la Humanidad.
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Fuente: World History