Cuando se anunciaba el fin del mundo a finales del siglo XX el mejor crítico de Estados Unidos en lo que se refiere a la Arquitectura en esa época era Herber Muschamp. Sus escritos en el diario The New York Times eran nuestro alimento en los 90s, el fue quien pronunció la famosa frase sobre el Seagram y lo calificó como el mejor edificio del milenio. Este rascacielos con 38 oficinas de Manhattan, fue proyectado y construido por Ludwig Mies van der Rohe en asociación con Philip Johnson, y fue la versión más refinada de rascacielos de cristal moderno, y se muestra qué materiales se utilizaron para su construcción.
El Seagram se encuentra Ubicado en Park Avenue dejo libre una amplia plaza de granito rosa Vermont, los bordes de ambos lados son láminas de agua y plataformas de mármol antiguo verde. Su torre es una estructura de acero que esta rodeada de un muro como si fuera una cortina de vidrio de color rosa gris. Los Polines monten y las vigas I, fueron utilizadas para modular la superficie de la piel de vidrio, estas fueron hechas de bronce. Las paredes y los ascensores están revestidos con mármol travertino. El detalle de la superficie exterior se determinó cuidadosamente por la expresión exterior deseada. La piel metálica de bronce de la fachada no es estructural, pero se usa para expresar la idea de la trama estructural que se encuentra en el interior.
El Arquitecto Ludwing Mies van der Rohe definió la arquitectura como la voluntad de una época traducido en espacio. Que significa la superación de la guerra de los estilos, que tenía una arquitectura fragmentada batallando en diferentes bandos ideológicos. Y así comenzó a experimentar con diseños de torres de cristal en la década del año de 1920. Ludwig Mies van der Rohe fue considerado como el maestro de la arquitectura moderna. Pues a creado espacios elegantes, que trascienden con una arquitectura basada en los materiales y la integridad estructural. Pues utilizó materiales modernos como son el vidrio y el acero industrial para crear espacios contemplativos de elegancia.
Philip Johnson fue más influyente en la arquitectura americana del siglo XX. Y era Alumno de Mies van der Rohe y Mercel Breuer, este edificio fue uno de los primeros trabajos de Johnson, con su innovador uso de cristal y acero, por lo que rindió homenaje a sus antiguos mentores. Fue crítico y comisario en el Museo de Arte Moderno, y defendió el trabajo de los modernistas europeos por lo que fue en gran parte responsable de llevar sus ideas a los Estados Unidos. Era un arquitecto prolífico, con un sinnúmero de edificios a su nombre, Johnson transformaba el paisaje urbano de Estados Unidos. Cincuenta años después de su finalización, sigue siendo admirado por muchos visitantes todos los días y es un ejemplo de un rascacielos de estilo internacional en medio de la ciudad de Nueva York.
Fuente: metalocus.es
Otras Fuentes: Láminas y Aceros