El ciclismo en Bélgica es de otro nivel. En una de sus provincias crearon Cycling through the Trees (Pasear en bicicleta entre árboles) una experiencia única entre árboles de 10 metros de altura.
El proyecto consiste en un carril bici que se integra de manera armoniosa con el entorno natural. El camino asciende suavemente hasta alcanzar una altura de 10 metros y se extiende a lo largo de 700 metros, con un diámetro de 100 metros. En este tramo, los ciclistas pueden disfrutar de la experiencia única de circular entre las copas de los árboles, antes de descender nuevamente al suelo del bosque.
El nuevo puente ciclista se erige sobre una estructura compuesta por 449 columnas únicas de acero envejecido, evocando los troncos de los pinos, lo que permite que toda la construcción se integre de manera armoniosa con su entorno natural. El respeto por la flora y la fauna fue un elemento fundamental tanto en el diseño como en la construcción del puente dentro del bosque.
Los árboles talados para el carril bici ahora forman un pabellón informativo con troncos reciclados al inicio de la ruta. El proyecto se implementó con la naturaleza como protagonista, formando un vínculo lógico en el "ciclo de vida" de Bosland.
Esto es sin duda, una experiencia bastante creativa, duradera y elemental para quienes siempre buscan contacto con la naturaleza.
Fuente: HNA.es
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