En la ciudad de México surgió el proyecto de aumentar el tamaño de la organización con una construcción adicional; la idea era aumentar las instalaciones durante el tiempo en que se pueda decretar su identidad arquitectónica.
En un terreno que no tiene conexión con el campus universitario se construyó el nuevo edificio con aulas para la Facultad de Ciencias Químicas de la Universidad la Salle Campus Central, su capacidad de uso de suelo, el entorno y la intuición arquitectónica, actuaron con fuerza tangible que se convierte en una masa delgada y alargada que ejecuta la revelación constructiva por medio de sus elementos estructurales y las cubiertas que lo envuelven estratégicamente para alejarse de las arquitecturas cercanas y alcanzar su mejor función.
El terreno tiene de 2000 m2 construidos, reforzados en 6 niveles; con 15 salones de clases que cuentan con una capacidad de 30 a 40 pupilos que serían 480 discípulos; con áreas aptas para funciones académicas recreativas y culturales, así como oficinas y salones para maestros. Las aulas se conectan en forma horizontal por medio de un pasillo público que se encuentra en el interior del campus, que les sirve para celebrar conferencias o exposiciones académicas; como acabado tiene una escalera fija y muy larga, que une a la planta baja con el primer piso, que dirige al área de oficinas. Desde ahí se pueden ver varias escaleras metálicas que unen a todos los niveles de aulas hasta la cubierta. Ese pasillo hace que el transeúnte sienta un vacío. La cubierta es como un espejo de la entrada en sus geometrías, como en su capacidad.
La materialidad ligera y translúcida, por la multiplicidad de su revestimiento desconcentra los límites entre el interior y exterior, provocando una conversación entre la arquitectura y consigo misma. El muro de afuera del edificio ya no llama la atención como antes. Lo que se hace notar más es por dentro donde hay un espacio con un marco estructural que se delinea por medio de un muro de vidrio.
El edificio fue construido con aproximadamente 250 toneladas de acero estructural con columnas y marcos rígidos; con doble revestimiento compuesta en el interior a base de block celular y en su exterior a base de paneles sándwich metálicos; con un método de doble acristalamiento en su fachada; paneles metálicos multiperforados; y muros de concreto armado que le dan claridad y simplicidad arquitectónica al edificio.
Fuente: archdaily.mx
Oras Fuentes: laminasyaceros