Laminas y Aceros

En ocasiones anteriores te hemos conversado de las estructuras metálicas y su versatilidad en diseños constructivos; en esta entrega te hablaremos de los acabados en color que puedes lograr para estos tipos de aceros.

Este tipo de aplicación, además de proporcionar color aporta protección a la estructuras. Con el paso del tiempo, se pueden presentar diferentes procesos de corrosión y es cuando las pinturas pueden actuar como agente aislante para que el acero pueda hacer frente a las amenazas climáticas u otros factores que pueden degradar el metal. La pintura forma una barrera protectora contra la acción del oxígeno y otros elementos agresivos que provocan reacciones sobre el acero. Como hemos reiterados en blogs anteriores, todos los metales cuando están expuestos a las inclemencias del tiempo, especialmente en zonas de mucha humedad y situaciones salinas; la presencia de yodo en el aire así como también la sal en zonas costeras oxidan la superficies y la debilitan; sufriendo la alteración de las propiedades propias del acero; el clima los degrada si están sin cobertura, lo que provoca cambios no sólo en su apariencia, sino también en su capacidad de resistencia como estructura.

Para evitar los inconvenientes antes mencionadas,  se deben realizar tareas periódicas para mantener los acabados en óptimas condiciones y asegurarnos la presencia de las propiedades estéticas y físicas del material.

Refiriéndonos a las pinturas, existen diferentes tipos de pinturas; barnices, esmaltes, lacas, colorantes, entonadores y selladores; cada uno con unas propiedades físicas y químicas que corresponden a un uso en específico, ya sea por el tipo de superficie a aplicar, el carácter estético o las inclemencias a la que va a estar sometido. 

Como en todas las superficies, antes de aplicar el material a utilizar debemos preparar el área para la mejor adherencia.

Las pinturas mayormente utilizadas son:

• Esmalte acrílico: Ofrece resistencia al agua, aunque poco a poco va perdiendo brillo cuando está expuesto al sol. Tiene varias ventajas: fácilmente lavable; según el tipo pueden ser de secado lento o rápido y tiene buena extensibilidad.
• Esmalte sintético: Este tipo de pintura  conserva el brillo, incluso a la intemperie. El acabado es liso, con aspecto mate, satinado o brillante. Se utiliza mucho para proteger superficies tanto en el exterior como interior.
• Pintura intumescente: Es un sistema de protección pasiva contra incendios. Esto significa que aunque no ayudan a extinguir el fuego, sí reducen la magnitud de los daños. Es utilizada para realizar recubrimientos resistentes al fuego en todo tipo de elementos estructurales como vigas, columnas y placa. Este tipo de pintura evita el aumento de la temperaturas del acero a un nivel crítico.

Se pueden proteger las estructuras metálicas en las diferentes construcciones, lo ideal es conocer el tipo de riesgo según el ambiente para definir el sistema de recubrimiento adecuado.

*LAMINAS Y ACEROS, no comercializa este tipo de material.

Link: LAMINAS Y ACEROS

Fuente: Esmeteva