Laminas y Aceros

Entre las narraciones sobre hechos e historias sobrenaturales se dice que el tequila nació por medio de una perturbación atmosférica acompañada de mucha lluvia y viento, que cuando cayó una chispa eléctrica de gran intensidad producida por una descarga entre 2 nubes y la tierra encima de un cultivo de agave le causó un incendio donde seguidamente su fluido produjo calor a las piñas de agave haciendo que brotara una sustancia amarilla demasiado dulce con un olor atrayente e interesante para la gente oriunda del poblado, que descubrieron que al descomponerse la sustancia ésta tenía poderes de euforia y alivio a los efectos del estrés en la mente y el cuerpo al beberla.

Por lo que pensaron que era una ofrenda de los dioses de la embriaguez. Razón por la cual en muchas pinturas se hace referencia a la bebida y al dios Baco. El Tequila es un brebaje de origen antiguo, una mezcla de alcoholes provenientes de la fermentación y la destilación del zumo de agave que se produce desde el siglo XVI y que lleva el nombre del poblado de donde surgió este agua ardiente y en el cual hay un gran número de fábricas productoras de ese licor. Por mucho tiempo se le conocía como vino de mezcal pues al agave se le llamaba mezcal. Derivado de las agaváceas, es el agave tequilana Weber variedad azul. Hay aproximadamente 295 distintas especies de agaves y sólo una se utiliza para hacer la bebida. Pues con otras clases de agaves se elabora el mezcal y el pulque.  

Un producto que exclusivamente se puede producir en estas regiones y son: Jalisco, parte de Nayarit, Michoacán, Guanajuato y Tamaulipas. Hay 2 categorías para los tequilas. De acuerdo con la NOM se compone de al menos 51% de azúcares derivados del agave y lo demás de las azúcares de caña o jarabe de maíz. A lo que se le llama Tequila Mixto pero de acuerdo con la norma se les debe llamar Tequilas. Y el que es Tequila 100% puro de agave que está compuesto de la miel que produce la piña o bola de agave por lo que se utiliza 3 kg de agave por cada litro de tequila y 6 kg de agave por cada litro 100% de la bebida.

Por su proceso de maduración, los tequilas se clasifican en 5 variedades o clases:

Tequilas blancos o platas: Son tequilas transparentes, no incoloros, que después de su destilación no pasan por el añejamiento en madera. O los reposan en contenedores de madera menos tiempo.

Tequilas Jóvenes u oro: Es el resultado de mezclar tequila blanco con un reposado, añejo o extra añejo. Igual se le nombra joven al resultado de la adición de un suavizador de sabor del tequila que no ha tenido un tiempo de maduración.

Tequila Reposado: Producto suavizado con algunos de estos ingredientes: Color caramelo. Extracto de roble o encino naturales. Que se madura en contenedores de madera mayores a 600 lt. Barricas de roble o encino por un periodo de 2 meses y menor a 12 meses.

Tequila Añejo: Producto que se suaviza con Extracto de roble o encino naturales con maduración de contacto directo con la madera, en barricas de roble o encino de hasta 600 litros deberá ser de por lo menos 12 meses y menor a 36 meses.

Tequila Extra Añejo: Producto cuya maduración es en contacto directo con barricas de madera de roble o encino de hasta 600 litros deberá ser de por lo menos 3 años. Al conocer más sobre las categorías y clases para los tequilas, te será más sencillo decidir que tequila es el que más te gusta. 

Fuente: casasauza

Otras Fuentes: Laminas y Aceros de Yucatán