Los materiales que sufren este tipo de cambio son el acero y el hierro. Aunque en sentido estricto el hierro también es un componente de principal de las aleaciones del acero. Ambos son materiales muy familiares a nuestra vida cotidiana y es que se utilizan para crear toda clase de productos que sin darnos cuenta nos acompañan en nuestra día a día.
Erróneamente muchas personas tienden a confundir ambos materiales, sin embargo, como se menciona arriba el hierro y el acero no son lo mismo. La variedad entre el acero y el hierro es que ofrecen una gran gama de materiales y esta basado en las propiedades deseadas.
La fundición esta compuesta completamente de un material en estado líquido para después moldearlo y así solidificar. Este material roma la forma del molde conforme se va enfriando y una vez que quedo solido se retira del molde. Por ejemplo una sartén de cocción es producto cotidiano que se hace con hierro fundido.
El forjado es un proceso para formar un metal es para crear en forma de lingote o de hoja usando alta presión, ya sea con golpes con un martillo o a presión con un troquel. En este proceso el material se calienta para facilitar el forjado pero siempre que da un material sólido. Por ejemplo los cuchillos de cocina son hechos con este proceso. Aunque el acero puede ser forjado o fundido se suele especificar el grado y tipo de material real para aclarar sobre el proceso utilizado.
El proceso de fundición es utilizado cuando se tienen productos con partes huecas ya que es ideal mediante un molde, al realizar este proceso es eficaz la creación de productos con interiores complejos como los que requieren las cámaras, mientras que para el forjado por el proceso de que el material no sale del estado sólido es complicado realizar acabados huecos ya que es necesario tallar o abrir agujeros sin embargo es un proceso relativamente rápido y con mayor resistencia.
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Fuente: TLV