Laminas y Aceros

Nuestro cuerpo es una gran maquinaria perfectamente armada; pero como todo buen engranaje, requiere de una constante revisión y mantenimiento.  Hoy en especial queremos referirnos a nuestro cerebro. Mantenerlo sano es importante para nuestra óptima salud. Conforme envejecemos nuestro cerebro cambia y nuestras funciones mentales con él. El deterioro cognitivo es una de las consecuencias más temidas por todos de nuestro respectivo envejecimiento biológico. Sin embargo, la buena noticia es: este deterioro no es totalmente inevitable. Diferentes estudios han comprobado que hay diversas actividades que se pueden realizar de manera continua que permiten mantener un cerebro estable y sano.

A continuación te explicamos algunas recomendaciones que puedes seguir para lograr este objetivo:

1. Estimula tu cerebro con actividades creativas:   puedes realizar acciones que estimulen tu mente, estas  permitirán  que tu cerebro desarrolle nuevas conexiones (sinapsis) y plasticidad cerebral (capacidad del cerebro para generar nuevas células). Cualquier actividad que permita un esfuerzo mental adecuado fuera de tu rutina diaria; ejercicio mental tales como armar rompecabezas, problemas matemáticos, leer, dibujar, la pintura, hasta los conocidos crucigramas o sopas de letras; ayudan a mantenerlo activo. 
2. Practica ejercicios físicos: aplicable para cualquier parte del cuerpo, el ejercicio físico nos mantiene en un nivel óptimo de energía y ayuda a tu salud en general. Usar los músculos también ayuda a la mente y reducir el estrés mental. No necesariamente debes correr a inscribirte a un gimnasio para lograrlo; bastan con ejercicios sencillos como: sacar a pasear al perro, una caminata por la playa, subir y bajar escaleras, etc. cualquiera de éstas estimulan tu cerebro. 
3. Dieta saludable: en nuestra alimentación está la clave de todo nuestro funcionamiento. Una nutrición adecuada ayudará a tu cuerpo y tu mente eficazmente. El alimentarnos sanamente nos puede ayudar a ser menos propensos a desarrollar deterioro cognitivo o demencia.
4. Duerme y descansa lo adecuado y suficiente: Si estás cansado, ni tu cuerpo ni tu mente rinden lo suficiente. Dedicarle horas de sueño a tu cerebro, es reactivarlo de energía para que al despertar puedas estar más lucido y pensar de manera más clara y concisa; adicional lo ayudas alejarse del stress mental. Lo mínimo recomendado es descansar por lo menos siete horas de sueño de buena calidad cada noche.   Evita los trasnochos innecesarios.
5. Dedícate tiempo para ti y relájate: aunque no lo notes, nuestro cerebro es de los órganos del cuerpo que siempre está trabajando, razón por la cual, debemos relajarnos y hasta cierto punto realizar actividades que nos produzcan diversión. Al liberarnos de nuestras rutinas habituales nuestros pensamientos se pueden organizar mejor. 
6. Evita el consumo de tabaco y alcohol: El tabaco en todas sus formas y el beber excesivamente alcohol son causales de demencia. 

Sólo con algunos cambios en tus hábitos puedes alargar la vida útil de tu cerebro, no lo descuides porque se ha comprobado que aún cuando puedas estar viviendo los famosos años dorados de la vida puedes tener una mente lucida e ideas brillantes.

Fuente: Neuromexico.org

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