La vivienda más famosa de la Habana nombrada como la casa de las tejas verdes, fue diseñada por el arquitecto José Luis Echarte, contratado por el señor Alberto de Armas y que fue construida en el año de 1926. Se encuentra ubicada en la entrada del municipio de Miramar. Tiene un estilo muy peculiar en el diseño que fue de renacentista alemana.
Alberto Armas vivió en la casa de tejas hasta el año de 1943 ya que luego ocupo la casa la Sra. Luisa Catalina Rodríguez quien vivió ahí hasta el último día de su vida. La propietaria siempre se negó a abandonar su hogar y murió en ella en el año de 1999, en ese momento el inmueble presentaba un franco deterioro; sin embargo, continuaba siendo una edificación impresionante. No obstante el gobierno de Cuba se adueñó del inmueble tras la muerte de su anciana propietaria, para con ello hacerle unos cambios a la casa.
La casa de las tejas verdes se destaca entre sus contemporáneos por su diseño distintivo que se basa en gran medida en la arquitectura de estilo renacentista alemán. La casa cuenta con una fachada simétrica con elegantes arcos y columnas, un techo ornamentado con tejas decorativas de color verde y un impresionante balcón de hierro forjado. En el interior, los visitantes pueden admirar detalles exquisitos, como puertas y ventanas de madera intrincadamente talladas, hermosos paneles de vidrieras y frescos pintados a mano en las paredes.
La fachada de las tejas verdes es un testimonio de la cultura y la historia de Cuba que todos pueden apreciar, ya sea que esté buscando echar un vistazo al pasado de la isla. Este edificio icónico continúa cautivando a lugareños y turistas por igual con su diseño único y su impresionante artesanía, lo que lo convierte en una de las casas más queridas de La Habana.
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