Recordemos que en el Blog titulado: "laminado en frío y caliente", hablamos sobre cada uno de estos, describiendo el procedimiento de su realización así como las principales diferencias entre uno y otro.
En el siguiente Blog te hablaremos sobre las ventajas y desventajas que tiene el laminado en frío y te contaremos algunas de las aplicaciones que tienen.
El laminado en frío aumenta la resistencia y dureza del acero, a costa de disminuir su ductilidad por lo que hace necesario someterlo posteriormente a un proceso de recocido para dotarlo de sus propiedades finales.
Los aceros sometidos a este tipo de laminado se utilizan en una gran variedad de productos como automóviles, línea blanca, luminarias, motores eléctricos, herramientas agrícolas, contenedores y materiales de construcción. Cuenta con espesores entre .30 y 3.0 mm.
Ventajas
El laminado en frío suele ser perfecto para realizar piezas pequeñas y detalladas, también para las necesidades más grandes como realizar acabados más finos ya que permiten un mayor control en el resultado final. Cuenta con:
- Excelente nivel de tolerancia dimensional.
- Excelentes acabados superficiales, brillantes, lisos y sin rugosidades.
- Mejora de niveles de resistencia, tensión y elasticidad.
- Mejora en los niveles de maquinabilidad.
- Potenciación de todas las propiedades metálicas del acero.
- Duración más larga de la vida del producto.
Desventajas
A pesar de potencializar las propiedades mecánicas del metal tiene sus desventajas como el precio un factor directo ya que es más caro que el laminado en caliente y es que el costo debe ser considerado por el valor de las piezas terminadas.
- Moldeabilidad limitada, solamente se pueden logra ciertas formas geométricas: redonda, cuadrada y plana.
- Hay una reducción en la ductilidad y la resistencia a la corrosión.
- Se hace necesario un proceso extra de recocidos
Otros links: Láminas y Aceros
Fuente: Vikingroup, Ferrosplanes, Ternium