Conocemos como estructura metálica al esqueleto que soporta o carga un edificio o vivienda. Su principal función es mantenerlo estable, que lo conecte y fije al terreno a través de un sistema de correctos cimientos.
Antiguamente muchas casas carecían de cimientos. Sólo eran muros de cerramiento e internos construidos de adobe, ladrillo o piedra sin ningún sistema de estabilidad y protección a la construcción. Si nos remontamos a siglos antes de nuestra era, la mayoría de los edificios tenían entramados de madera. Después de la revolución industrial, resurge el auge hacia el acero. Las antiguas estructuras fueron reemplazadas por estructuras metálicas ya que su resistencia era mayor y se comportaban mejor frente a un incendio o movimientos de tierra (temblores, terremotos).
El acero es un material con infinitas características; es fuerte, resistente y necesita poco mantenimiento. Los avances técnicos permiten nuevos tratamientos para proteger al metal de la oxidación y hacerlo más resistente en caso de incendio. En otras ocasiones, la apariencia oxidada se logra a través del uso de químicos que permiten que su contacto visual logre ambientes cálidos como lo es la "Decoración con Acero Corten".
Al ser un material altamente industrializado permite crear desde grandes estructuras a las más sencillas, lo que lo convierte en un material flexible, versátil y fácil de combinar. Mediante su uso podemos construir las más imaginativas estructuras y propuestas decorativas de interior. Es importante resaltar que nos referimos a un material 100% reciclable, lo que implica una reducción del impacto ambiental respecto a otros materiales cuyo fin es exclusivamente la demolición y en algunos casos contaminantes.
Experimentar con estructuras metálicas, tiene sus ventajas y desventajas. Una estructura de acero puede convertirse en protagonista de la decoración del espacio que la contiene, su presencia estética es altamente notable en el espacio en que se emplee. La estética industrial hoy está muy de moda en la decoración y es tendencia en el diseño de interiores. Existen variedades ilimitadas de tratamientos para ser aplicados en una estructura de acero o bien optar por su apariencia cruda o natural, y dejarla desnuda para potenciar su aire industrial y crear una propuesta de decoración vanguardista y diferente.
Los arquitectos y diseñadores de interiores al momento de realizar sus diseños contemplan el uso intensivo del acero, se esfuerzan especialmente en crear formas y lograr volúmenes interesantes y funcionales a la vista. Sacan provecho de las bondades que brinda el metal como un reto a su creatividad.
Podemos encontrarnos con estructuras mixtas donde se han combinado materiales de diferentes texturas y acabados acompañando a las estructuras metálicas. Las columnas, los elementos de soporte vertical, las vigas de soporte horizontal, láminas estructurales y los demás elementos que conforman la estructura de soporte de cubiertas y pisos en una construcción se pueden combinar hormigón, madera, aluminio y otros materiales.
Existen una gran variedad de perfiles, tamaños y pesos. Esta gama de posibilidades es lo que hace del acero un elemento interesante en el interiorismo de viviendas y en el área industrial. Tu imaginación es el limite puedes crear techos, escaleras, estanterías, muebles o cualquier otra propuesta de decoración que seamos capaces de fabricar. Sin embargo, viendo más allá de lo grandioso que significa construir con acero y sus aplicaciones en la industria de la construcción; podemos concluir diciendo que es un material de uso cotidiano, versátil y muy amigable. "Decoración industrial, un estilo diferente"
Día tras día se encuentran nuevos y variados usos a partir del desarrollo de productos con propiedades mejoradas, acabados y formas diferentes; así como nuevas aleaciones y recubrimientos.
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Fuentes: El Comercio