Las funciones que realiza una tuerca son las siguientes:
La tuerca es un elemento que está normalizado de acuerdo con los sistemas generales de roscas que existen y siempre debe tener las mismas características geométricas del tornillo con el que se acopla.
Las tuercas más utilizadas son aquellas denominadas tuercas de apriete, es decir, las que tienen como función ajustar tornillos.
La tuerca hexagonal es la que más se utiliza. Su uso es muy básico, utilizándose para apretar tornillos fundamentalmente.
La forma de la tuerca mariposa es muy característica, ya que tiene como dos solapas sobresaliendo de la propia tuerca.
En la tuerca ciega encontramos un único orificio de entrada/salida, y está pensada normalmente como elemento decorativo dadas sus características.
La tuerca autoblocante se caracteriza por presentar, en uno de los lados del orificio, un aro de nylon. La función de este elemento es bloquear el tornillo que se engancha en la tuerca, para evitar que este se afloje en casos de vibración o movimiento brusco. Es especialmente útil en mecánica, ya que es en estos casos cuando precisamente suelen existir situaciones de vibraciones.