Un almacén autoportante es donde se sustituyen las estructuras tradicionales y vigas por un sistema hiperestático a manera de mecano formado por las estanterías destinadas al almacenaje.
El sistema de estanterías metálicas que "autosoportan" el almacén se encuentran en descanso sobre la losa de cimentación empleando un gran número de apoyos de muy pequeña dimensión. Estos apoyos a su vez, van anclados a la losa por medio de pernos metálicos con diferentes longitudes y dimensiones. De manera que la losa de cimentación debe presentar una serie de condiciones de diseño y puesta en obra específicas para el buen funcionamiento del almacén autoportante; ya que se puede asegurar que lo que es funcional para un edificio tradicional no lo será para uno autoportante.
Las losas de cimentación tradicionales generalmente requieren grandes espesores de concreto, grandes armados con barras de acero y la omisión de juntas funcionales. Por consiguiente los armados tradicionales para grandes estructuras exigen plazos de obra que deben tenerse en cuenta para la planificación del proyecto y por ende en los costos.
Algunas de las condiciones para estos estantes son:
Al elegir un almacén autoportante por sobre una nave industrial, se vita la construcción que ésta última implica, además de que es posible automatizar al máximo el espacio de almacenaje disponible. En estas estructuras metálicas se almacenan palets de peso elevado y disponen de un numero elevado de bastidores que permiten repartir el peso de manera uniforme sobre el suelo del almacén.
Ventajas
Otros links: Làminas y Aceros.
Fuente: Revistacyt.com