La Construcción de un aeropuerto es todo un ejemplo de ingeniería moderna, para llevar a cabo este tipo de proyectos es necesario contar con los mejores expertos en el tema. En México la necesidad de contar con un mayor y mejor espacio ha hecho la realidad de un nuevo aeropuerto, que satisfaga las crecientes necesidades de la nación y el del turismo internacional. El nuevo Aeropuerto Internacional de Santa Lucía “General Felipe Ángeles” le dará solución a todas ellas, todo esto garantizando no sólo la practicidad de la obra, sino la seguridad que siempre debe rodear a un proyecto tan importante para la infraestructura aeroportuaria metropolitana y nacional.
Este nuevo proyecto para México, está siendo supervisado y elaborado preparados ingenieros militares que se apegan a cumplir con esta misión, siempre con la mejor calidad y materiales posibles.
La realización de un proyecto se compone de varios elementos importantes que hacen un gran todo. En esta ocasión nos vamos a referir principalmente a la torre de control de tráfico aéreo.
En un aeropuerto es quizás una de los elementos más importantes. En este lugar se realizan y se registran todas las operaciones y todos los datos que se le indican a todas las aeronaves para despegar o aterrizar con toda los elementos de seguridad necesarios.
La estructura total de la torre de control tendrá una superficie de 9968.03 m2; Peso aproximado de 14,000 toneladas y su altura será de 88 metros (misma que permitirá tener una amplia visión de todas las pistas de aterrizaje). Estará compuesta de la área administrativa, académica, de recreación, una subestación eléctrica y planta de emergencia, necesaria para que nunca deje de funcionar aún cuando llegase a presentarse algún desperfecto eléctrico. En general, es un aeropuerto en el que se refleja la practicidad y funcionalidad; además de ser moderno y sustentable.
En cuanto a su diseño se juega con la excelente combinación de acero y concreto; inspirado principalmente en nuestras raíces prehispánicas, tiene la forma de un macuahuitl (todo en acero), arma que se utilizaba para defensa y ataque, mientras que su base tiene la forma de un chimalli,(acero y concreto reforzado) escudo tradicional para las culturas mesoamericanas.
La torre tendrá una vista de 360 grados, lo que permite tener una vista de todo el panorama areoportuario; 12 posiciones lo que se traduce en que en ella se podrán trabajar de manera simultánea hasta 12 controladores aéreos, de esta forma, no hay posibilidad de perder la vista y el análisis de los datos de estos expertos en navegación aérea.
Los materiales utilizados en la construcción de la torre serán especiales para evitar el reflejo de los rayos del sol, así como la inclinación de los cristales para evitar deslumbrar a los pilotos. Además, está diseñada para soportar los posibles efectos de un eventual sismo, tomando en cuenta los materiales usados que mitigarán las vibraciones eólicas y los desplazamientos de tierra.
En horas de la noche, la torre estará iluminada con diversos colores que harán de ella una majestuosa pieza de arte arquitectónico.
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Fuente: Aeropuertos modernos