Los barriles de madera se han utilizado desde tiempos remotos para transportar todo tipo de objetos tanto sólidos como líquidos (vino, clavos, pescado, pólvora, etc), dichos barriles los fabricaba el tonelero quien era el experto en su construcción. Estos barriles fueron los primeros utilizados para almacenar cerveza.
En la actualidad se utilizan barriles de acero inoxidable y en menor medida se utiliza el aluminio. Esto debido a las mismas características y beneficios que habíamos comentado en el blog Tanques de buceo acero vs. aluminio, características tales como resistencia a la presión, golpes, duración, etc.
Estos barriles soportan grandes presiones que se dan por el mismo proceso de fermentación de la cerveza, así como por los gases añadidos para facilitar la salida del líquido para ser servidos a sus comensales. Dichos gases suelen ser aire (aunque el aire tiende a afectar el sabor del producto) o mezclas de gases como el CO2 y Nitrógeno.
El tonel tiene un sólo orificio en un extremo. De ahí parte un tubo interno que llega hasta el otro extremo. El orificio tiene una válvula automática de presión que se abre al acoplar una pieza -pinchar el barril- que permite extraer la cerveza, así como inyectar por otra válvula del mismo orificio gas a presión.
Estos barriles de acero generalmente son depositados en agua fría o hielo para permitir que el líquido se enfríe y sea más agradable al paladar, todos sabemos que la cerveza más sabrosa es la más fría, aunque increíblemente en otros países se acostumbra tomarla a temperatura ambiente.
Fuente: Barriles de Acero para Cerveza
Otro link: Láminas y Aceros