El termino "off-grid" comienza escucharse muy a menudo en los diseños arquitectónicos sostenibles. Se refiere a un tipo de construcción que no está conectado a la infraestructura de servicios públicos, tales como la red eléctrica, wifi, el suministro de agua y el sistema de alcantarillado. Por el contrario, una vivienda "off-grid" genera su propia energía, recolecta y trata su propia agua, y gestiona sus propios residuos. Basado en lo anterior, es un tipo de construcción que puede considerarse autosuficiente y sostenible. El concepto "off-grid" (también conocido como fuera de la red) hace referencia a la independencia de los sistemas convencionales de suministro, lo que permite que estas cabañas funcionen de manera autónoma mediante recursos naturales y sostenibles.
Este tipo de estructuras permite que se desarrollen en lugares impensables, ya que sólo requiere del buen aprovechamiento de la naturaleza y el ingenio del hombre. Sin embargo, es importante señalar que no nos referimos a cavernas y viviendas rudimentarias; al contrario, son viviendas que suelen estar equipadas con tecnologías y soluciones que les permiten ser autosuficientes,
Utilizan materiales tales como paneles solares para generar electricidad, sistemas de recolección y filtración de agua de lluvia, baños secos o compostables, y sistemas de calefacción alternativos, como estufas de leña o energía geotérmica. Se trata principalmente de combinar materiales sostenibles con la energía que puedes obtener a través de la naturaleza.
Las primeras construcciones se pensaron para desarrollarse en áreas apartadas, rurales o remotas, pero hoy también existe la posibilidad de convertir una vivienda de la ciudad en un oasis autosuficiente.
Lo más interesante de utilizar este patrón de construcción es que puedes ser una elección a un estilo de vida más sostenible y autosuficiente, reduciendo la dependencia de recursos externos y minimizando su impacto ambiental para las futuras generaciones.
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Fuente: Arquitectura y diseño