Laminas y Aceros

Anquilosaurios los animales más poderosos de la historia.

Written by Landy Ordoñez | Sep 20, 2025 7:00:00 PM

Los Lagartos acorazados eran unos dinosaurios de talle pequeño y corpulento, con 4 patas resistentes, una coleta compuesta de espinas y una sobresaliente armadura. No obstante, hay novedosos descubrimientos de fósiles que revelan que sus antepasados más antiguos eran incluso más aterradores que sus sucesores. La revista Nature se ha focalizado en la osamenta parcial de un anquilosaurio que vivió a mediados del periodo jurásico, una especie de dinosaurio arcaico que fue encontrado en Marruecos y procedente en unos 165 millones de años.  

El esqueleto contiene 6 costillas con espinas, una estructura ósea de la pelvis, al hueso sacro con espinas de diferentes medidas, implante para estabilizar fracturas en el cuello y 2 pares de prolongadas espinas, una de sus espinas que media 87 centímetros de longitud. Este hallazgo demuestra que los anquilosaurios más añejos tenían una coraza sin referencias entre animales que tienen un esqueleto óseo o cartilaginoso con una columna vertebral segmentada y un cerebro grande encerrado en un cráneo, diferente a la de sus correspondientes sucesores.  

Los lagartos acorazados se identifican especialmente en el hábitat del hemisferio norte desde hace unos 100.5 a 66 millones de años, pero su transformación en el sistema y período geológico central de la Era Mesozoica el cual continúa siendo una incógnita a causa de los insuficientes restos de animales que haya vivido en épocas geológicas pasadas.  Una parte de costilla fue encontrada en los Montes Atlas hace ya varios años lo cual llevó a los investigadores a suponer que era de Spicomellus afer, el lagarto acorazado más viejo. La fresca evidencia, que era más completa pudo reafirmar el parecido del animal, brindando nuevos fragmentos: pero se trataba de un enorme animal que se alimenta de las hojas de los árboles y arbustos que evocaba a una combinación entre tortuga y puercoespín con una coleta gruesa con púas. 

De igual forma los vestigios de la cola del Spicomellus pudo tener una doble intención: como lo son sorprender y ampararse, a diferencia de los anquilosaurios siguientes del Cretácico Inferior duró desde hace 145 millones de años hasta hace 100,5 millones de años, y el Cretácico Tardío duró desde hace 100,5 millones de años hasta hace 66 millones de años, que exponían armaduras más sencillas y con escasa ornamenta. De esta manera, el Spicomellus se proclama como uno de los lagartos acorazados más extraordinarios investigados ahora por la ciencia. 

Fuente: lavanguardia.com

Otra Fuente: laminasyaceros.com