El origen de la Torre Mapfre se remonta a la última década del siglo XX. Este edificio fue construido para albergar los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992. En aquel momento, el conjunto formado por la citada torre y el Hotel Arts Building (uno al lado del otro) estaba formado por dos grandes rascacielos de 154 metros de altura, lo que lo convertía en el segundo edificio más alto de toda España. Sin embargo, debido a la construcción de otros gigantes en el país, ahora se sitúan entre los más altos de Cataluña.
Sin embargo, la importancia de la Torre Mufla de Barcelona no ha disminuido en nada. Un rascacielos, una de las playas más visitadas del barrio de San Marty, uno de los centros de oficinas más importantes de la ciudad. Además, la mayor parte del nombre proviene de la oficina donde se encuentra el rascacielos de la empresa del mismo nombre "Mapfre", pero con el tiempo el edificio se ha convertido en sede de otras empresas y centros comerciales.
El edificio tiene 40 pisos de altura y 154 metros de alto y se puede ver desde toda la ciudad. Equipado con avanzado sistema de seguridad, aire acondicionado y comunicación, cada piso cuenta con 4 centros de servicio independientes, 8 elevadores móviles de dos pisos de alta velocidad, detección automática de incendios, cámaras de vigilancia y sistema de alerta de contacto. Los lados de la torre alternan entre partes inclinadas y opacas del vidrio, rompiendo los contornos característicos de los rascacielos y creando un efecto Miller en las partes inclinadas. Mantenga constante el lado del suelo. movimiento. Grandes rincones de sombra en la oficina en todas las plantas excepto en la superior, que es el balcón que rodea el edificio.
La Torre Mafre soporta fuerzas laterales a través de un núcleo central de hormigón armado que incluye un ascensor, con 26 columnas alrededor de cada uno, retirado del plano de fachada y sin ser perturbado por materiales de construcción envueltos en vidrio, aluminio y acero. Su planta es monumental, mide 1.100 metros cuadrados, divididos en módulos de 275 metros cuadrados, y un techo temporal permite el paso de cables y conductos de lámina metálica.
Fuente: Sh Barcelona
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