En la colina de Heinrich Hildebrand, al sur de Duisburgo (ciudad que forma parte del área metropolitana de Alemania) yace una escultura que a primera vista luce como una montaña rusa de cualquier parque de diversiones, pero conforme uno se acerca, se puede visualizar que es una pasarela caminable, claro sin poder utilizar la parte circular para caminar.
Hecha enteramente en base a perfiles y tubos galvanizados por inmersión en caliente, se presenta con el sello de la protección y durabilidad, atributos que esta tecnología aporta al acero. El visitante puede subir a la obra de arte a pie. Aunque el curso describe un loop (círculo) cerrado, es imposible acceder a él, pues el mismo emerge como una barrera física. En la parte más alta, (45m sobre el suelo) el visitante se ve recompensado con una vista extraordinaria sobre el paisaje de la ciudad.
Con 44 x 37m de base y una altura de 21m de construcción, la escultura no es sólo una de las más grandes en Alemania, sino también una obra maestra de la ingeniería. El proyecto de las escaleras que serpentea a lo largo de la forma tridimensional, conlleva un reto hasta ahora nunca logrado.
"Tigre y la Tortuga" hace referencia la velocidad y estancamiento a la situación de cambio en la región y su giro hacia la renaturalización y la reestructuración.
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Fuente: Arquitectura en acero
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