Hay veces que los conflictos políticos entre los países llevan a tomar decisiones radicales al momento de realizar obras de infraestructura, así como en muchos aspectos de la convivencia internacional, tal es el caso de la región de Dubronik en Croacia.
La región de Dubrovnik está separada del resto de Croacia por la franja costera de Neum, única desembocadura al mar de Bosnia y Herzegovina. Para pasar de una parte a otra de Croacia, es necesario transitar a través Bosnia, por la ciudad portuaria de Neum, o coger un transbordador entre las ciudades croatas de Trappano y Porto Tolero. Existen vías carreteras para llegar de un punto a otro pero estas implican el tener que cruzar las fronteras entre Bosnia y Herzegovina con las consiguientes molestias y atrasos de los cruces entre países. El proyecto de puente pretende unir la región de Duvrovnik del resto de Croacia sin pasar por el corredor bosnio de Neum.
Por estas mismas situaciones Bosnia rechazó la construcción del puente argumentando que pudiera obstaculizar el paso de los buques mas grandes. Croacia solicito el apoyo a la Unión Europea quien actuó como mediador para la realización de este proyecto y acordando participar con el 85% del costo de la fabricación, es decir, 357 000 000 (trescientos cincuenta y siete millones) sobre un total de 420 000 000 (cuatrocientos veinte millones) de euros. El proyecto comenzó en 2007 por parte de las autoridades croatas, pero se interrumpió en 2012 a causa de la crisis económica.
El contrato para la construcción del puente fue firmado en abril de 2018 entre el gobierno croata y el consorcio chino China Road and Bridge Corporation; en el proyecto trabajaron 200 obreros, de los cuales 150 son chinos y 50 croatas.
El puente atirantado, el mayor de Croacia, tiene 55 metros de altura, 13 arcos, entre ellos cinco principales de 285 metros, y seis pilares de 33 metros con una longitud total de 2400 metros.
Para el acero se utilizaron más de 50 mil toneladas de acero fabricados en las siderurgicas croatas y el que cual fue fabricado de manera especial para resistir las inclemencias del mar del norte y permitir flexibilidad ante los constantes vientos que azotan la zona.
Fuente: Euronews
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