A partir del terremoto ocurrido en Ecuador en abril del 2016 que devastó las provincias ecuatorianas de Esmeralda y Manabí el bambú cobro una gran importancia en la construcción, sobre todo como material estructural a tal grado que llegó a conocerse como el nuevo acero vegetal.
Con una altura de casi 20 metros de altura esta caña de nudos macizos y típica de los suelos húmedos, renació como material de construcción, esto en los planes del Gobiernos de Manabí, Ecuador por su gran flexibilidad, resistencia y sostenibilidad en la región así como la abundancia que existe.
Una parte primordial del bambú como material de construcción es un enfoque medioambiental, y cultural puesto que también fueron recuperadas técnicas de construcción de tradiciones antiguas, ya que un grupo étnico ecuatoriano solía recurrir a la caña para construir sus viviendas debido a la frescura y la fácil accesibilidad que se tiene de este material.
El bambú también lo combinan con otros materiales, estos sobre una cimentación de hormigón colocando unos chicotes donde se engarza la caña en modo de pilares hasta dar forma a la vivienda. Esto se tomó en cuenta dentro de un proyecto en la Facultad de Arquitectura de la universidad Laica Eloy Alfaro.
El reto es que se utilicen los materiales de manera técnica y responsable aprovechando ciencia y tecnología moderna. Es un proceso que se lleva desde la plantación y vigilancia del crecimiento de la caña y debe ser cortada en el momento adecuado y se deseca. Sin embargo se debe cortar de acuerdo a las fases lunares ya que la luna tiene un efecto en la humedad de la planta.
Sus propiedades de flexibilidad hacen que la caña "absorba" los movimientos sísmicos, y bien combinadas se pueden construir con ellas edificios de hasta 5 y 7 pisos. Para ello, al igual que como ocurre con el hormigón, todo depende del grueso de columna que se requiera, sin embargo, sólo es cuestión de ir agregando caña para lograr el cometido.
Para que todos los líquidos dentro de la caña ya hayan descendido se debe cortar en el cuarto menguante de madrugada, con marea baja. Este proceso es crucial para avinagrar la caña y que se conserve mejor ya que cuanto más seca mejor.
Cuando el bambú esta verde se debe bañar con ácido Bórico y bórax para poder eliminar insectos y comer el fruto. El bambú Guadua es el mejor por sus propiedades físico-mecánicas, ya que tienen poco peso y de alta resistencia. Una caña de 10 centímetros puede aguantar de 2 a 3 toneladas de comprensión lo que es equivalente a una columna de concreto de 15 por 15, y se pueden construir con ellas edificios de 5 y 7 pisos, todo depende del grueso de la columna que se requiera.
Otros links: Láminas y Aceros
Fuente: Arquitectura sostenible, EFE, Mundo Constructor, La Opinión.