¿A quién no le gustaría tener una piscina en el jardín? A todos, claro, pero no siempre se dispone de espacio o de suficiente dinero para hacer esa obra.
Algunas piscinas están hechas de acero galvanizado, madera, con tubulares de plástico, pvc o inflables, a continuación te vamos a hablar de estos tipos de piscinas:
La estructura utiliza el acero más resistente para la construcción de las piscinas, además están dotadas de una tecnología anti-sísmica resistente a los movimientos del terreno. En algunas de éstas, combinan la resistencia del acero, la fuerza del concreto y la elasticidad y la estanqueidad del liner.
Su instalación es rápida, pues toma de 3 a 4 días.
Estas piscinas destacan por la belleza que le aporta la madera natural. Pero también poseen resistencia y durabilidad, si se desea algo menos delicado que la madera maciza, hay diferentes tipos de este material que saben imitar bien el aspecto de la madera y no requieren tanto mantenimiento.
Este tipo de piscina son las que se desmontan con más facilidad también son de fácil instalación gracias a su estructura tubular en las que sus piezas se ensamblan unas con otras, se pueden reubicar en donde tu desees.
Esta piscina por su material son las más económicas que podrás encontrar en el mercado y cuentan con diferentes formas, colores y medidas, la instalación de esta piscina es simple y rápida debido a que no posee ninguna estructura en la cual apoyarse, este es más recomendable para un día de campo ya que al no tener ninguna parte rígida los niños pueden jugar dentro de ella sin riesgo de golpearse.
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Fuente: Portal jardin.