Un impactante diseño futurista que nos muestra sus milenarias piezas que hay en su interior. Se encuentra ubicado a un lado de los yacimientos arqueológicos de Jeongok, en Corea del Sur. Un Museo de la Prehistoria, una transformadora cápsula del tiempo que aloja en su interior la mayoría de las figuras arqueológicas acerca de los primitivos. El volumen del proyecto se inspira en la forma de una serpiente.
Se encuentra envuelto de acero inoxidable diseñado de esa manera para poder mantener la temperatura por dentro y dirige la entrada de luz por medio de varios orificios que se pueden tapar o destapar según las necesidades de iluminación. A pesar de su aspecto futurista, se resolvió el volumen del edificio para que se integre al contexto, el recurso era realizar sobre la estructura varios caminos revestidos de piedras y que a lo lejos mostrara como si fueran las huellas en cómo se mueve una víbora encima de la tierra.
En el interior del Museo, se cuenta con un espacio para exposiciones, un área para la educación y varias actividades, en donde se muestran escenas de la prehistoria. El edificio fue pintado en colores blanco y gris, con muros y techos lisas, para hacer que destaquen las exposiciones.
Fuente: Noticias.arq.com.mx
Otras Fuentes : Laminas y aceros de Yucatán