Recientemente se ha impulsado el uso de la bicicleta como medio de transporte, entre otras cosas, como una forma de reducir las emisiones contaminantes y aligerar el tráfico en las ciudades. Sin embargo, con el aumento de bicicletas en circulación se presenta un problema en forma de espacios para estacionarlas y mantenerlas en resguardo. Dejarla encadenada ya sea en el parque, en la escuela, supermercado u otro lugar público esperando a que no sea el objetivo de algún ladrón rondando por el lugar, ya no parece una opción tan segura.
Es entonces que muchas ciudades han comenzado a crear estacionamientos para bicicletas de las cuales hablaremos en este blog.
Un estacionamiento para bicicletas, también es conocida como marquesina para bicicletas, pueden ser cerrado o abierto y puede ser colocado donde haya mayor necesidad de ese espacio. Las dimensiones pueden variar según las necesidades de los usuarios, así como la cantidad de bicicletas que pueda almacenar y el tipo de material a utilizar.
Existen modelos que garantizan una total seguridad y protección frente a los ladrones de bicicletas o de piezas de bicicletas. Vienen equipados con diferentes características y pueden ser fabricados con elementos como tubos y perfiles PTR de acero negro o galvanizado, con una cubierta de policarbonato sólido de 5 mm de grosor, además de brindar protección contra los actos vandálicos empleando paneles y puertas corredizas del mismo material.
Características
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Fuente: Fortacero