La enfermedad de Chagas, también conocida como tripanosomiasis americana, es una infección que puede llegar a ser mortal, es causada por el parásito Trypanosoma cruzi (chinches).
Se transmite principalmente por el contacto de las heces de las “chinches besuconas”, con heridas o mucosa, por picadura de estos insectos infectados, por transfusiones de sangre infectada. Estos insectos suelen habitar en viviendas rurales de América Latina. Principalmente en comunidades rurales pobres y con falta de servicios de salud públicos.
Esta enfermedad, en su fase aguda, solo suelen presentarse algunos síntomas como pueden ser:
En su fase crónica de esta enfermedad puede ocasionar enfermedades como pueden ser:
- Complicaciones cardiacas.
- Problemas digestivos.
- Enfermedades neurológicas graves.
La fase crónica de esta enfermedad suele suceder por no darle la atención correcta a estas picaduras de la chinche o a heridas infectadas, lo que ocasiones que se mantenga en el cuerpo este parasito y después de dos o más años empiezan a surgir estas complicaciones crónicas graves.
La detección de la enfermedad de Chagas a tiempo es crucial para un tratamiento exitoso y se diagnostica por medio de pruebas de sangre específicas que identifican la presencia del parásito o de anticuerpos. El tratamiento con medicamentos antiparasitarios, como benznidazol o nifurtimox, es más efectivo si se administra en la fase aguda. Sin embargo, en la fase crónica, el tratamiento se enfoca principalmente en manejar las complicaciones que tenga cada paciente.
La prevención de la enfermedad de Chagas se basa en el control del insecto transmisor mediante la mejora de las viviendas, el uso de insecticidas y campañas de educación pública. Además, se realizan controles en bancos de sangre y programas de tamizaje para mujeres embarazadas en áreas endémicas. La vigilancia constante y la promoción de diagnósticos tempranos son estrategias esenciales para frenar su propagación.
Fuente: Gobierno de México
Otras Fuentes: Laminas y Aceros.