Su objetivo se basa en el estudio de las aguas minerales y marinas, específicamente, en los efectos de éstas sobre el organismo humano. La hidrología médica se enfoca en el análisis de dichas aguas, a diferencia de la hidroterapia, la cual utiliza principalmente el agua potable para el mismo fin.
De este modo, la hidrología se ha especializado dentro del enorme campo de la medicina y la terapéutica, en emplear las aguas termales y minerales como agentes curativos, teniendo en cuenta, además los factores del clima, higiénicos, psíquicos, etcétera, que influyen también en la recuperación de los pacientes. Es una especialidad creada en el año 1955 y de ámbito no hospitalario.
Es una disciplina que se enfoca en la prevención y tratamiento de enfermedades y lesiones, se vincula con clínicas especiales en rehabilitación de afecciones traumáticas, reumáticas o neurológicas, así como a spas y balnearios, cuyo significado derivan del latín salutem per aquam, salud a través del agua.
Entre los tratamientos más frecuentes están los baños, las inhalaciones de oxígeno, mascarillas pudiendo ser de cera o arcilla, masajes con hierbas o aceites, ejercicios fisioterapia, todo esto ayuda a prevenir enfermedades o tratarlas.
Fuente: Webs.um.es, Spadreams, Hidromed
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