El foso de la serpiente una represa milenaria de la antigua ingeniería maya que se encuentra ubicado en Uxmal, Yucatán. Un espejo de agua que llevaba años sin llenarse del que no existía fotografías, que ahora se puede admirar. Se dice que esta represa tiene aproximadamente 2 metros de profundidad, es más grande de lo que se esperaba, no tiene orillas lodosas, sino bordes de muro bien sólidos a pesar del tiempo que ha pasado sin derrumbes y grietas. A unos metros de la orilla, se observa el esplendor del agua de Uxmal.
Para conocer el foso de la serpiente, hay que remar y atravesar el lago por completo, antes de entrar a la represa pide permiso a los dueños espirituales de estos vestigios para que con cuidado se pongan las embarcaciones en el agua algo mágico e irreal. Los huracanes Isidoro, Cristóbal y la furia de Chaac fueron devastando la tierra del Mayab, pero toda esa furia nos dejó una represa maya que está recuperando su capacidad para ser admirada en su verdadera magnitud.
Las lluvias incesantes que pasaron por días y noches recargaron un sistema de represas que se fueron fracturando por el paso de los años y han lastimado su concepción y cálculo por el cambio climático y las precipitaciones. Para lograr mirar el fondo del estanque de agua desde la orilla del Chen chan Akal se tuvo que utilizar un dron y se descubrió un Uxmal distinto. Se pudo ver una ciudad a la orilla del agua y el agua a la orilla de la ciudad. Uxmal es la ciudad con dilemas contemporáneos. Es la que almacena más agua de lluvia para los tiempos de sequía. El tiempo hizo que se puedan hacer pocos registros fotográficos de ese regalo de la ingeniería del Puuc.
Al oscurecer se debe terminar el recorrido en balsa sobre el agua que prueba las hipótesis de que Uxmal no es una belleza arquitectónica, es un tesoro de ingeniería. Sí, el Foso de la Serpiente es importante para la gloria de Uxmal como la Pirámide del Adivino o el Cuadrángulo de las Monjas. Uxmal con su mar artificial en primer plano, es inevitable cambiar nuestra perspectiva, sólo que no habíamos apreciado lo que estaba a la vista de todos.
Otras Fuentes: Laminas y aceros Yucatán