Tener una casa en un lugar turístico o concurrido algunas veces es beneficioso pero otras veces puede ser algo problemático, por eso los propietarios de la casa "Mundo Espejo" tenían bien establecidas sus prioridades al construir su hogar.
Esta casa a las afueras de Tokio, se ubica justo frente a un templo budista, por lo que el flujo de gente es constante, así que una de las peticiones claramente es la privacidad pero sin estorbar las vistas hacia el templo.
Para lograr eso se colocó una valla de laminas de acero en forma de zigzag a lo largo de todo el perímetro de la casa, de tal manera que esto le proporcionara privacidad a la familia pero sin la sensación de estar aislado y al mismo tiempo estableciendo una conexión simbólica a través de la carretera que separa la casa del templo.
La otra prioridad de los dueños para con la casa era poder vigilar y supervisar a sus hijas desde la cocina, por lo que la construcción se dividió en 2 espacios, el primero de dos plantas, el cual tiene una estructura curva y se ubica hacia el fondo de la parcela.
El segundo, es un espacio mas bajo junto a la calle, es un anexo de una sola planta frente a la misma casa que sirve como un puente visual y espacial entre ambos lados.
Además de las laminas de acero en la fachada, la casa cuenta con una estructura de madera e interiores revestidos en contrachapado de ciprés y suelos de hormigón; dividida en tres habitaciones en el piso superior y en el piso inferior las áreas comunes, baños y cocina.
Se instalaron ventanales orientados hacia el sur para regular la temperatura de toda la casa, pues en invierno permite la entrada de la luz y calor del sol y en los meses calurosos unas cortinas exteriores regulan la radiación el sol.
Fuentes: NEO2, Arquitectura Viva
Link: Laminas y Aceros de Yucatán