La restauración del almacén Isumi que se encuentra ubicado en municipio situado en el Oriente de la Península de Boso. Nació por una extraña petición realizada del dueño de la bodega, pues necesitaba un lugar para resguardar unos muebles y aparatos de cocina una herencia familiar. Pero también quería habilitar el terreno como casa habitación que les sirviera para vacacionar con su familia y amigos.
En el almacén hay un pequeño espacio; mitad rural, mitad urbana, con muchos árboles que lo protegen del viento fuerte que llega del mar. La corriente marina es un elemento que describe el área, más frio en verano que en Tokio. Los muebles que se tenían que guardar adentro del almacén no eran tan finos para la temperatura y humedad, solo se necesitaba resguardarlos y así protegerlos de la lluvia y el viento. La idea era engrandecer este almacén; fabricar una parte de arquitectura estrictamente en una fachada.
El revestimiento de la fachada se encuentra conformada por una lámina ondulada y policarbonato ondulado. No hubo necesidad de que se utilizaran cristales ni marcos con vigas, pues las ventanas y puertas fueron fabricadas a la medida. A la bodega se le instalaron inmensas puertas corredizas y puertas de abertura acostada y recta que fueron diseñadas para que den luz cuando se abran.
Adentro de esta estructura se puede instalar una casa de campaña o cochera si fuera necesario. Una estructura que permite disfrutar de una atmósfera cambiante en donde los habitantes podrán encontrar alegría y pasar más tiempo con la naturaleza.
Fuente: archdaily.mx
Otras Fuentes: Laminas y acero de Yucatán