(999) 290 93 87Desde su creación, el acero a venido a formar parte importante de la civilización, pues debido a sus propiedades y características ha impulsado el desarrollo de las ciudades llegando a encontrarse prácticamente en todo lo que nos rodea, principalmente en obras civiles, medios de transporte y aparatos que mejoran la calidad de vida de las personas.
En ocasiones estas construcciones llegan a convertirse en un rasgo característico de un lugar y se vuelven parte de su identidad, tal fue el caso de la ciudad de Mérida y sus famosas veletas de acero que adornaban el paisaje de la capital Yucateca a finales del siglo XIX y principios del siglo XX.
Windmills in Mérida, fotografía de The Real Devil Doll. Fuente: Flickr
Según nos cuenta la historia, la primera veleta de la ciudad fue instalada el 30 de marzo de 1880 en la villa de la familia Crasseman, conocida también como La casa de los alemanes y que años después fuera llamada La Quinta Iturralde, ubicada a unos cuantos metros de lo que actualmente es el Parque Zoológico del Centenario.
Durante ésta época la manera de obtener agua potable, era sacándola del fondo de un pozo con ayuda de un cubo, una soga y puro trabajo a pulso. Naturalmente, la puesta en funcionamiento de esta veleta marcó un hito en la historia de la extracción y suministro de agua potable en el estado de Yucatán pues el proceso de extracción y almacenamiento de agua se volvía mucho más sencillo.
Zona residencial de Mérida con veletas para extracción de agua. Fuente: RuralMx
Eventualmente este innovador invento, nacido de la mente de Don Raúl Perón, fue distribuido en gran escala en el territorio yucateco por la compañía AerMotor Chicago Co. que ponía una veleta al alcance de todo aquel que contara con el dinero suficiente. Su popularidad fue tal que no había obra que no contara con uno de éstos artefactos, como es el caso del hospital O'Horán que ya en 1906 contaba con numerosas veletas instaladas en espaciosas áreas de jardín que suministraban de agua al hospital con capacidad para 400 personas.
Panorama de Mérida con veletas por toda la ciudad. Fuente: México en Fotos.
Así, la ciudad de Mérida se fue llenando lentamente de estas veletas de hierro que se alzaban por sobre el paisaje raso de la capital yucateca, cualquiera que arribara a la ciudad por vía aérea era testigo de tan pintoresco panorama: una superficie plana cubierta de un interminable bosque de color verde del que sobresalían centenares de veletas, como si se tratase de un prado de flores de acero. Fue entonces que Mérida, además de ser La Ciudad Blanca se ganó también el sobrenombre de La Ciudad de las Veletas.
Otros Links: Láminas y Aceros.
Fuentes: Recordando las Veletas de Mérida, Ciudad de Veletas, Al rescate de las veletas.
