(999) 290 93 87En este blog te explicaremos un poco sobre la razón por la que no deberías utilizar las láminas reflectivas que son conocidas como elementos que van colocados por adherencia en los paneles para conformar una señal de tránsito visible.
Si se hace una aplicación de láminas reflectivas sobre acero inoxidable al paso del tiempo se presentarán manchas grises en el material, debido a la interacción de la capa metalizada de la lámina reflectiva y el substrato de acero. Las diferencias inherentes entre los dos metales, es decir se presenta la electronegatividad, que es causada por el establecimiento de una celda de corrosión galvánica y crea un voltaje o potencial diferente, que es la fuerza que conduce una corriente eléctrica para que fluya entre estos dos metales.
Como resultado de esta reacción, el metalizado en la lámina reflectiva comenzará a oxidarse y a degradarse con el tiempo.
Esta reacción se produce en cualquier lámina, pero tiene mayor probabilidad que se note en las láminas externas o que se encuentran expuestas al sol, viento y lluvia, o en cierta manera si se ha aplicado una capa adhesiva y luego se retira es muy probable que como consecuencia se dañe el material. Un medio efectivo para controlar la degradación es crear una barrera entre el acero inoxidable y el metalizado. Posibles soluciones incluyen pintar o recubrir el substrato o añadir un material sensible a la presión entre la lámina y el substrato.
Uno de los grandes factores que pueden afectar este material es la aplicación o fluido de agua que hace que se acelere el proceso de corrosión, por lo que si se requiere de aplicar láminas reflectivas en substrato de acero se recomienda no tenerlo en un lugar húmedo.
Pero para evitar esto existen láminas reflectivas especiales para acero inoxidable. Estas láminas están diseñadas para disminuir o eliminar la reacción galvánica entre los diferentes metales.
Fuente: Jnaceros
Otro link: Laminas y Aceros
